La asamblea de los muertos (Salamandra, 2017), de Tomás Bárbulo.
Se nota cuándo un libro está traducido de algún idioma y cuándo está escrito en español, sin traducciones de por medio.
La asamblea de los muertos (Salamandra, 2017), de Tomás Bárbulo, es uno de los del segundo grupo. Está escrito por un periodista de El País, y tiene ese lenguaje sencillo del español sin traducciones. Después de leer varios (muchos en realidad) libros traducidos de otros idiomas, leer este me ha recordado que las traducciones son maravillosas, pero que escribir un libro en español directamente a veces se echa de menos.
En la página web donde lo vi por primera vez y en el propio libro pone que tiene un ‘final insospechado’, pero, realmente, el final puede preverse conforme van sucediéndose los acontecimientos. Al fin y al cabo, si estas atento a los actos de unos y otros, te das cuenta de qué es probable que pase. Hace falta concentración si quieres crearte una imagen detallada de cada personaje, porque hay muchos, cada uno con su características personales.
Que el final sí pueda preverse no significa que no sea un buen libro. Es la primera novela del autor y me parece muy buena, una novela española de verdad (por el escenario, los apodos de los personajes, etcétera) que, sin duda alguna, me va a servir de inspiración para escribir. Me ha encantado cómo detalla a los personajes, sobre todo al Guapo, al Chiquitín y al Saharaui. El último capítulo (el número 67) sí es totalmente insospechado. Te deja boquiabierto porque el autor introduce algo perfectamente viable y con lo que no habíamos contado a lo largo del libro. Sin más dilación, quisiera recomendar este libro con ahínco.