Autor/a extranjero/a · Epistolario

En Ronda, de Rainer Maria Rilke

En Ronda. Cartas y poemas (Pre-Textos, 2012), de Rainer Maria Rilke y traducido por Juan Andrés García Román.

Un libro delicioso de un autor que me toca muy de cerca.

En Ronda. Cartas y poemas (Pre-Textos, 2012), de Rainer Maria Rilke y con una introducción de Anthony Stephens, es un librito que reúne el conjunto de cartas y poemas (lo dice el propio título) que el genio alemán/austriaco/checo escribió durante su estancia en Ronda, un municipio situado en la provincia de Málaga (España).

No es el tipo de libros que suelo comprar, pero si se trata de Rilke sí lo compro y lo leo. Hay algunos novelistas que me gustan mucho, y también poetas como Pedro Salinas, Federico García Lorca o, como toca ahora, el mismísimo Rainer Maria Rilke. No es un poeta muy conocido en España, quizá más en Toledo y en Ronda que en el resto del país, porque en ambas ciudades estuvo un tiempo. A Toledo fue buscando inspiración y, según se dice en este libro, no la encontró. A Ronda fue, por el contrario, a descansar, y terminó encontrando la inspiración que no buscaba.

Yo pasé mucho tiempo de asueto en Ronda (vacaciones, fines de semana…) y por eso conocí a Rilke. ¿Un gran poeta aclamado por tantos lectores de todo el mundo que vivió en el mismo municipio donde yo iba con frecuencia? Pues sí. Me interesé tanto por él que al final me gustó mucho su forma de pensar, la poca obra que he leído de él y las biografías sobre Rilke que poco a poco voy acumulando para saber más de este genio.

Creo que no es un libro, por tanto, que guste ni atraiga a mucha gente. Ni mucho menos es un libro comercial. Iba por la primera edición cuando lo compré a principios de año y no parece que vaya a tener muchas más compras (ojalá me equivocara, porque es necesario también leer este tipo de libros). Si alguna vez, querido lector o querida lectora, tiene usted tiempo libre y algo de dinero que desee gastar en algo fructífero y útil, indague y compre este librito. Toque con delicadeza su maquetación rugosa y lea cuidadosamente su frágil contenido. Ame a Rilke, al vidente y lo oculto (como lo llama Mauricio Wiesenthal), a su obra, a su historia, y llore su temprana muerte como yo lo hago.

En las cartas, dirigidas principalmente a Lou Andreas-Salomé, Sidonie Nádherný y Marie von Thurn und Taxis, Rilke habla de su breve estancia en España. Toledo, al parecer, le ha gustado mucho, le ha llevado al éxtasis, y no solo por los cuadros de El Greco. Córdoba le ha convertido en anticristiano y ahora lee el Corán, Sevilla le ha decepcionado, porque ve a la ciudad muy sobrecargada (por resumir la impresión de Rilke sobre la capital andaluza) y Ronda, adonde ha llegado por casualidad, le ha fascinado, le gusta ese «aire fuerte y magnífico», el encaje entre las montañas de la ciudad, y puede verse cómo en sus poemas hace referencia a Ronda al nombrar el Tajo y el río que discurre bajo su sombra. Desde Ronda espera la visita de Sidonie, a quien aconseja que vaya, pero no lo consigue y termina dejando la Ciudad del Tajo en febrero de 1913, marchando a París (no quería ir antes a la capital francesa por el frío). Se lamenta de no poder ir a Málaga o Granada y alude varias veces a que Gibraltar está a solo tres horas desde allí, y Tánger a dos desde Gibraltar.

Por tanto, Rilke nos abre brevemente su corazón con su pluma, nos permite conocerle un poco más a través de estas misivas, algunas de ellas premiadas con poemas muy sugerentes sobre el poeta, su vida y su estancia en Ronda, una de las ciudades más bonitas, extrañas y especiales del mundo, en mi opinión.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s